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Global. Hoy se conocieron los datos de mayo del PCE (personal consumption expenditure price index), la medida preferida de la FED para monitorear la inflación. Los números de este índice resultaron estar en línea con los esperados, no habiendo variación con respecto a los esperados por el consenso y por debajo del 0,3% del mes anterior. Este guarismo lleva la medida anual a un incremento del 2,6%, bajando en un 0,1% con respecto al mes anterior y por dentro de las expectativas. Para el PCE core, que excluye los datos de precios de alimentos y energía, que son más volátiles, estos datos mostraron un incremento del 0,1% en términos mensuales, menor al 0,2 del periodo previo y en línea con lo esperado por el consenso. El aumento interanual fue del 2,6%, dentro de las expectativas y también marcando una baja desde el 2,8% observado en abril.
Estos son buenos resultados para una FED que hace unos meses viene acumulando datos alentadores. Estos datos, en conjunción a los recientemente observados de PBI y de seguros por desempleo podrían estar señalando a un enfriemiento de la economía. Sin embargo, los comentarios de los miembros directivos de la FED se mantienen en línea con la postura de cautela, con Raphael Bostic, de la FED de Atlanta comentando que si los datos inflacionarios son positivos un recorte de tasas llegaría recién cerca de fin de año.
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