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Local. Por el lado local, puede entenderse también un grado de optimismo en el mercado, aunque con la clara diferenciación de que el “aterrizaje” de las variables económicas es claro: será un “hard-landing“.
A la par de las expectativas por la desregulación de empresas y de las propias condiciones de negocios en el país, también puede relacionarse que el grado de volumen que se está viendo desde el balotaje se debe a que las alternativas financieras son pocas:
– Las tasas de los instrumentos de renta fija son bajas frente a la fuerte inflación
– Las brechas vuelven a despertarse
– Los pesos que no buscan comprar dólares, no encuentran muchos puertos de estadía más que en estos activos financieros.
— ¿Conformarse con tasas reales muy negativas o asumir riesgo en activos variables con tal de acercarse a la variación inflacionaria?
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